Cardio Protección Castellón
Calidad y experiencia a tu disposición
Eslabones de la cadena
La importancia de reconocer la situación crítica y/o el ataque cardíaco y de evitar la
parada cardiaca, así como la atención posterior a la Resucitación, queda resaltada mediante la inclusión de estos elementos en la cadena de supervivencia de cuatro eslabones.
1. Reconocimiento Temprano
Reconocimiento temprano de la emergencia médica y solicitud de auxilio: activar los
servicios de emergencias médicas (SEM), a través del “112” (número de emergencias en
Europa), Una respuesta rápida y efectiva podría prevenir un paro cardíaco.
2. RCP Precoz
RCP precoz practicada por los testigos de la parada cardíaca: las maniobras de RCP
inmediatas, incluyendo las compresiones torácicas y ventilaciones (RCP inmediata) pueden
duplicar o triplicar la supervivencia de un paro cardíaco súbito, ganando tiempo hasta la
realización de la Desfibrilación.
3. Desfibrilación Temprana
Desfibrilación temprana: La desfibrilación es la única medida que puede permitir recuperar
un latido cardíaco efectivo cuando la parada cardíaca es provocada por una Fibrilación
Ventricular. Las maniobras de RCP más la desfibrilación en los primeros 3 a 5 minutos
después del paro cardíaco puede conseguir unas tasas de supervivencia muy altas, del 49
al 75%. Cada minuto de retraso en la desfibrilación se reduce la probabilidad de
supervivencia en un 10 a 15%.
4. Soporte Vital Avanzado
Soporte Vital Avanzado precoz y cuidados posteriores a la Resucitación: Lo realizan los Servicios de emergencias médicas desde su asistencia in situ, traslado en ambulancia/ helicóptero y cuidados post resucitación en el hospital. Estas medidas son fundamentales para recobrar una adecuada calidad de vida. La adecuación del tratamiento durante la fase posterior a la Resucitación afecta al resultado de ésta.